Un informe en el que se preguntaba a los reguladores y a las instituciones financieras tradicionales reveló que la mayoría sigue considerando que el ecosistema criptográfico es demasiado volátil y arriesgado.
Un estudio reciente compilado con las autoridades gubernamentales y los reguladores concluyó que todavía consideran que la industria de la cripto moneda es una fuente de riesgo importante. Esos establecimientos plantearon inquietudes con respecto a la autorregulación del sector y al número de actividades ilegales financiadas con activos digitales.
No es sorprendente: Los reguladores se preocupan por la reglamentación de la criptografía
El grupo de expertos en defensa y seguridad más antiguo del Reino Unido, el Instituto Real de Servicios Unidos (RUSI), publicó el estudio denominado Cryptocurrency Risk & Compliance Survey. Con el objetivo de arrojar algo de luz sobre la percepción general de las regulaciones dentro de la industria de los activos digitales, la investigación preguntó a los organismos de control del gobierno, a los representantes de la criptodivisa y a las instituciones financieras tradicionales sobre su aceptación.
Los encuestados de todos los sectores estuvieron de acuerdo en que el sistema de autorregulación dentro del campo de la criptografía no es suficiente. En consecuencia, afirmaron que los órganos gubernamentales y las organizaciones internacionales como el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) deberían intervenir para establecer marcos legislativos más transparentes y precisos.
En caso de que eso ocurriera, los participantes en la encuesta creen que se atraería a más inversores institucionales para que se unan a ella. Además, una reglamentación amplia podría mejorar el papel de las criptodivisas en los pagos cotidianos.
La mayoría de los encuestados (69%) respondieron que las criptodivisas son actualmente demasiado volátiles para sustituir el efectivo. También pusieron de manifiesto los posibles riesgos asociados a la gestión de los activos digitales. Los gobiernos y las entidades financieras tradicionales fueron aún más lejos al clasificarlas como una „fuente importante de riesgo“.
La criptografía en los esfuerzos ilegales
La mayoría de los participantes, incluso de la industria de la criptografía, señalaron que los activos digitales sufren por estar vinculados a un uso sustancial en actividades ilícitas.
„Todos los encuestados expresaron su preocupación por el uso de la criptodivisa por diversos agentes ilícitos, desde los grupos terroristas hasta los agentes sancionados y los traficantes de personas. Si bien el uso de la criptodivisa por los delincuentes sólo representaba alrededor del 1% de todas las transacciones, seguía siendo un lugar atractivo para quienes evadían el sistema financiero tradicional“.
De hecho, como CryptoPotato informó recientemente, el Departamento de Justicia de los EE.UU. incautó más de 300 cuentas en criptodólares operadas por tres notorias organizaciones terroristas – ISIS, Hamas y Al-Qaeda. Las autoridades francesas también detuvieron a 29 personas que presuntamente financiaban a yihadistas y miembros de Al-Qaeda mediante vales en cripto moneda.
No obstante, establecimientos bien regulados como las instituciones bancarias también han participado en muchas actividades ilegales. Documentos recientes de la FinCEN revelaron que bancos gigantes como HSBC, Standard Chartered, Bank of America y JPMorgan Chase, han transmitido trillones de dólares en transacciones sospechosas de esquemas Ponzi y organizaciones terroristas en las últimas décadas.